Fabriqué fragancias con tus flores y las vertí el jarrón murano que dejaste. A veces es denso el aire, los veleros fantasmas se anclan en mi mente y reclamo tu abrazo de alquimia, tu abrazo que ha trascendido a los metales del tiempo.Entonces burbujean en el aire los colores de tu esencia, hasta que un soplo de vida me regala el sabor irremediable de tus besos.